¿Cómo masajear la piel de la cara para tener un rostro terso y firme?
¡No te lo vas a creer! Hace unas semanas, mientras me hacía mi ‘skincare routine’ diaria, me di cuenta de que tenía el rostro un poco caído. ¿Será que las cremas que uso no funcionan? Me puse a investigar y… ¡No es ese el problema! El tratamiento facial que uso es el indicado pero, ¿qué pasa con la forma de aplicarlo?
Los milagros no existen, o eso dicen… Está claro que el primer paso (y el más importante) para cuidar la piel es tener una buena rutina facial que se adecúe a tu tipo de piel pero, ¿qué pasa con la forma en la que masajeamos nuestro rostro? ¡Este pequeño detalle puede marcar la diferencia! (Te lo aseguro).
Esto se debe a que los masajes faciales sirven como “lifting facial”, siendo estos mismos un instrumento antienvejecimiento y drenante. Por ello, aquí van los mejores consejos para conseguir una piel tersa y firme gracias a ellos:
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- Masajea el rostro con movimientos circulares y ascendentes: comienza del centro de la cara hacia las partes más externas del contorno de la misma. De esta manera, levantarás las facciones (si lo haces al contrario, estarás haciendo que tu piel caiga).
- Aplica las cremas a toquecitos con la yema de los dedos: de esta manera, no sólo conseguirás que tus cosméticos se absorban bien en la piel, sino que también estarás activando la circulación sanguínea en el rostro.
- Usa la cantidad de producto necesaria: no caigas en falsos mitos… ¡No hace falta usar mucho producto para que haga más efecto! De esta manera, lo único que conseguirás es crear un exceso de grasa en la cara. Pero… ¿cómo sé cuánta crema debo aplicar? Si hablamos de un cosmético que se aplica en todo el rostro (como la hidratante, el serum o la protección solar, por ejemplo) te valdrá con aplicar cinco puntos en el rostro: en la frente, la barbilla, la nariz y las dos mejillas (sin olvidarte del cuello y del escote, claro).
- Utiliza cremas con colágeno y efecto reafirmante: el colágeno no solo recuperará la elasticidad de tu piel, sino que también evitará la flacidez.
- Aplica tu rutina facial tanto de día como de noche: tan importante es la rutina de mañana como la de noche. Durante el día, nuestra piel necesita protegerse ante factores externos que pueden dañarla. Sin embargo, durante la noche estaremos dejando que nuestro rostro descanse y absorba con tranquilidad los principios activos necesarios.
¿Has probado alguna vez la
