¿Cómo cuidar la piel sensible? 5 consejos para saber qué productos usar
Si tienes la piel sensible, ¡este artículo es para ti! Sé que las rojeces, las irritaciones o las descamaciones, entre otras cosas, son problemas cutáneos que pueden llegar a incomodar… Pero, ¿has pensado si una buena rutina facial puede ayudar a calmarlos? Aquí van los mejores consejos para cuidar la piel sensible:
¡Es un hecho! La piel de la cara es mucho más delicada que la del resto del cuerpo porque está más expuesta a las agresiones externas; así como el frío, los rayos ultravioletas del sol o la contaminación, por ejemplo. Así pues, la función barrera de la piel tiene que combatir constantemente las agresiones externas.
Pero, si además de eso tienes una piel sensible, atópica o reactiva, la cosa se complica el doble. Esto ocurre porque al tener este tipo de piel su barrera externa se encuentra mucho más debilitada, por lo que los factores externos antes expuestos llegan a penetrar más profundo en la piel, llegando incluso a la dermis (capa más profunda de la misma).
Está claro que la piel desempeña una función de protección fundamental y que, en muchas ocasiones, no es tarea fácil. Por ello, lo mejor es que le ayudes a realizarla con 5 consejos para cuidar la piel sensible:
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Usa un limpiador exfoliante suave: limpiar la piel es un paso fundamental en cualquier rutina facial. Sin embargo, en los casos de piel sensible es importante escoger uno que limpie y no irrite la epidermis. ¿Has probado nuestro
Limpiador Facial Exfoliante ? Este jabón sólido no sólo elimina la suciedad y las bacterias del rostro, sino que también controla la producción de sebo gracias a su gran contenido en harina de avena y aceite de jojoba.
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Usa un limpiador exfoliante suave: limpiar la piel es un paso fundamental en cualquier rutina facial. Sin embargo, en los casos de piel sensible es importante escoger uno que limpie y no irrite la epidermis. ¿Has probado nuestro
- No uses cosméticos con retinol: el retinol es un derivado de la vitamina A que sirve para tratar arrugas y mejorar el aspecto de la piel. Sin embargo, y aunque su efectividad suele estar garantizada en la mayoría de los casos, es un ingrediente bastante agresivo para las pieles sensibles, por lo que enrojece e irrita aún más el rostro. En algunas ocasiones puede incluso causar cuperosis facial.
- Evita el entorno seco y los cambios bruscos de temperatura: estos pueden considerarse agresiones externas que pueden desequilibrar la piel.
- Evita el consumo de alcohol y tabaco: la piel sensible es demasiado delicada y la producción de radicales libres por parte de su consumo puede causar mayores perjuicios.
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Utiliza cremas que nutran, hidraten y fortalezcan la función barrera de la piel: tener una rutina facial basada en cremas frescas, hidratantes y ligeras puede ayudar a que tu piel combata las agresiones externas. Para ello, utiliza nuestro
Serum Regenerador a base de fibras vegetales especializadas que, además de calmar las irritaciones o picazones, previene los daños cutáneos y equilibra la microbiota de la piel para fortalecerla.
Ahora que ya sabes cómo cuidar la piel sensible, sólo falta que pongas en práctica todo lo aprendido. Para ello, es indispensable una rutina facial de uso diario que te ayude a calmar tu piel sensible. Así pues, la