¿Cómo cambia un hombre cuando es padre? ¡Todo lo que debes saber con la llegada de la paternidad!

¡Esto es así! Cuando una mujer se queda embarazada, no es la única de la pareja que sufre cambios… Aunque muchas veces no le demos importancia, el hombre también nota cambios al ser padre, tanto física como mentalmente hablando. Sin embargo, estos son mucho menos conocidos y estudiados… ¡Pero suceden con la paternidad!

Entre los cambios del padre durante el embarazo de una mujer destacan los siguientes:

Cambian los niveles hormonales:

Cuando su pareja se queda embarazada, es normal que en el organismo del hombre los niveles de testosterona desciendan; sobre todo durante el último mes. Pueden llegar a descender incluso un 33% de lo que se consideran los niveles habituales de esta hormona masculina en hombres. 

Por otra parte, en estas situaciones ciertos hombres producen un 20% más de prolactina en su organismo. Este aumento ayuda a desarrollar nuevos instintos como el agudizamiento del oído.

Se desarrolla el síndrome de Couvade:

A consecuencia del aumento de la prolactina y la disminución de la testosterona, y aunque no es muy usual, hay hombres que, durante los meses de embarazo de su pareja, sufren el síndrome de Couvade. A este trastorno psicológico se le conoce también por “embarazo psicológico” o “embarazo empático”. Estos pueden llegar a sufrir un aumento de peso (como si ellos también estuvieran embarazados) o incluso sentir síntomas propios de esta etapa, así como las náuseas, los mareos, el cansancio o los antojos.

Aunque aún se desconoce la causa exacta que provoca este trastorno, se cree que es consecuencia de un exceso de empatía hacia tu pareja.

Aumenta el estrés:

¡No es cosa solo de mujeres! Es normal que durante los meses de embarazo las dudas y las preguntas  atemoricen al hombre también (sobre todo si es primerizo). La incertidumbre por saber si sabrá hacerlo bien o la preocupación por poder mantener económica y emocionalmente a la futura familia invaden sus pensamientos en muchas ocasiones.

Aun así, es imprescindible que, tanto el hombre como la mujer, se permitan vivir una etapa de adaptación y apoyo mutuo.

Cambian las prioridades:

¡Es una realidad! La llegada de un bebé siempre cambia el estilo de vida de la pareja (aunque no tiene porqué ser negativo dicho cambio). Las renuncias y las nuevas implicaciones en algunas situaciones forman parte de este nuevo proceso de paternidad.

Aumenta la oxitocina:

La oxitocina es considerada la hormona del amor. Por ello, cuando un bebé llega a la vida de un hombre se estrecha el vínculo entre padre y bebé. Además, los niveles de estrés que se han elevado durante los meses de embarazo descienden considerablemente tras el parto, consiguiendo a su vez una sensación de bienestar emocional y de felicidad con su nueva “responsabilidad”.

Por lo tanto, si eres padre (o estás en proceso de serlo) espero que estas indicaciones te sirvan para entender tu cuerpo y tu mente para darte el tiempo y el espacio suficiente para adaptarte a esta nueva etapa que está por venir. Además, si quieres saber más sobre la paternidad responsable, ¡sigue leyendo!