Lavarse las manos, ¿de verdad lo hacemos bien?

¿Sabías que existe el Día Mundial del lavado de manos? ¡Pues sí! Y encima se celebra mañana, 15 de octubre!

Aunque creamos que los Días Mundiales no sirvan para nada, en verdad lavarse las manos es uno de los hábitos más importantes que mantenemos las personas en nuestra higiene diaria. Por lo que no viene nada mal que exista un día para que nos lo recuerde y que nos haga concienciarnos un poco más, ¿no crees?

La higiene de manos es tan importante que desde pequeños nos enseñan a lavarnos las manos en ciertas situaciones como puede ser antes de comer o después de ir al baño pero, ¿sabemos en realidad cuándo nos tenemos que lavar las manos?

¿Para qué sirve lavarse las manos?

Tal y como nos han explicado siempre, tener las manos limpias nos previene de coger infecciones y de contagiarlas a otros. Es más, según un estudio de la Universidad de Colorado, en la palma de la mano se reúnen más de 3.200 bacterias de 150 especies diferentes. ¡Una auténtica barbaridad! ¿No te parece? Después de haber descubierto este dato creo que está claro por qué el lavado de manos es imprescindible en la vida diaria de cualquier persona.

¿Cómo debo lavarme las manos?

Aunque lavarse las manos parezca un acto de lo más sencillo, en realidad la manera en la que te enjuagas o enjabonas las manos puede hacer que tu higiene de manos aumente o disminuya sin que te des cuenta.

Empieza por mojarte las manos con agua. ¡Pero cuidado! Ten en cuenta que debes evitar el agua caliente, ya que eso puede hacer que tus manos se resequen o se irriten mucho más de lo habitual. Lo ideal es que te laves las manos con agua tibia o fría.

El siguiente paso es el enjabonamiento de las palmas. Fácil, ¿no? ¡Déjame darte un consejo por si acaso! Según la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), lo mejor para el lavado de manos es el jabón, ya sea antibacteriano o normal. Esto se debe a que los geles desinfectantes te resecan mucho más la palma de la mano, ¡y que no te mientan! Tampoco es que sea más eficaz que el jabón…

A continuación viene el paso más importante: frotar las manos. Aunque parezca lo más sencillo del mundo, quizás debas saber que el frotado de las manos no se reduce solo a las palmas, sino que debes frotar toda la mano (incluso las muñecas) al menos durante 20 segundos. De esta manera, al jabón le dará tiempo a impregnarse en la piel.

Seguidamente enjuágate las manos. ¡Y recuerda! Con agua fría o tibia a poder ser.

Por último, sécate las manos. Puedes hacerlo o bien con una toalla limpia o al aire libre. Pero, por favor, después de haberte deshecho de muchos de los gérmenes que estaban en tus palmas, no te seques las manos con algún tejido que tenga incluso más… 

¿Sabes verdaderamente cuántas veces al día debemos lavarnos las manos?

Aunque no exista una cifra determinada que nos indique cuántas veces al día hay que lavarse las manos, como mínimo deberías lavártelas cuando tengan suciedad visible... Aun así, hay muchos más momentos del día en los que no viene nada mal mantener una correcta higiene de manos: al preparar o comer alimentos, al tratar heridas, al colocar o quitar las lentes de contacto, al ir al baño o al tocar una superficie que hayan tocado muchas otras personas, por ejemplo. 

¡Y no hagas caso a los rumores! ¿Cuántas veces habré oído a lo largo de mi vida que lavarse mucho las manos favorece a la resequedad? Pues no, no tiene porqué. Si haces todo el proceso del lavado de manos correctamente, no tienes porqué sufrir resequedad en tus manos por hacerlo muchas veces al día.

¡Así que ya sabes! Celebra mañana el Día Mundial del lavado de manos poniendo en práctica los consejos que has leído en este artículo, ¡y mantenlos ya en tu rutina diaria a partir de ahora!